«Es la asignatura que mejor se puede aplicar a nuestra vida diaria, además es en la que más se aprende» | Los alumnos no están de acuerdo con la medi

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A pesar de que quedan diez días para el comienzo de la actividad académica, el vienres el Isidro Parga Pondal parecía un hervidero de jóvenes. La noticia había corrido como la pólvora, aunque en forma de sms. «Nos enteremos de que este año no vamos a tener la asignatura de Biosaúde y nos parece una injusticia», comentaba uno de los estudiantes en la puerta del centro escolar. Los alumnos no entienden por qué no van a poder recibir lecciones de esta materia el próximo curso. «Es la asignatura que mejor se puede aplicar a nuestra vida diaria, además es en la que más se aprende», argumentaban los jóvenes.
El plan educativo previsto por el departamento de Ciencias del centro para el curso que comienza recogía numerosas actividades en las que los jóvenes tenían que investigar mediante disciplinas que, en la actualidad, -por el trepidante ritmo académico y por la falta de tiempo- no tienen cabida en otras asignaturas como Biología o Ciencias. Recoger muestras en el mar, cocinar alimentos saludables o participar en talleres prácticos sobre la anticoncepción formaban parte de esa optativa del centro que Educación no les ha impartido impartir este año. Retirar Biosaúde conlleva el final de actividades como la edición de la revista que elaboran cada años los alumnos de esta asignatura, la celebración de la Semana da Saúde o la elaboración de la página web. Todas ellas son iniciativas en las que los estudiantes se han comprometido hasta límites impensables y que han colocado al centro a la cabeza en proyectos de innovación educativo y que han permitido estrechar vínculos con otros institutos.